Garantizar el consumo de energía puede ser uno de los mayores retos a los que se enfrenta la sociedad actual. Según datos del International Energy Outlook 2019 , la demanda de electricidad irá en continuo aumento en las próximas décadas.

Se espera que, para 2050, el consumo de energía se incremente en un 50%. Esto supone que la demanda de electricidad aumentará en 1,3% año a año hasta 2040. Los sectores que más gastarán serán el industrial, el de la movilidad y las residencias.

Teniendo en cuenta este escenario, ¿cómo podemos garantizar el suministro de energía en el futuro?

Retos del sector energético en 2020

El sector de la energía plantea un año lleno de retos y de posibilidades para avanzar hacia un mundo más sostenible. Y es que la industria tiene que abordar una de las prioridades más urgentes del mundo: el cambio climático.

En la Conferencia sobre el Cambio Climático de la ONU en París en 2015, casi todas las naciones acordaron limitar el calentamiento global por debajo de los 2º centígrados, un límite que no estamos cumpliendo. En la pasada celebración de la COP25 se presentaron los resultados provisionales del informe del estado del clima de 2019:

  • Se vertieron a la atmósfera 36.800 millones de toneladas de CO2, un 0,6 % más que el año pasado.
  • Las emisiones de CO2 vinculadas a los incendios, la deforestación y otros cambios en el uso del suelo alcanzaron los 6.000 millones de toneladas de dióxido de carbono.

Además, este estudio resalta las consecuencias nocivas para la salud que nos está causando el calentamiento del planeta:

  • La ola de calor vivida de Japón causó más de 100 muertes y 18.000 hospitalizaciones.
  • Las altas temperaturas en los Países Bajos supusieron 2.964 muertes.

Por otro lado, la digitalización es otro de los pilares en los que se tiene que enfocar el sector energético. Aunque los avances digitales han llegado para facilitarnos la vida, es cierto que el incremento del número de dispositivos está generando un aumento de la demanda de electricidad sin precedentes.

Hoy en día, existen 3.000 millones de ordenadores que consumen más del 1% de la producción de energía. Además, 30 millones de servidores de computadoras utilizan un 1,5% adicional de la generación de electricidad mundial. Y no son solo los ordenadores los que usan toda esta energía. La explosión de los smartphones, tablets y otros dispositivos digitales está causando que todos esos números aumenten.

Para este año, se estima que habrá 50.000 millones de dispositivos conectados – unos siete dispositivos por cada persona en el planeta hoy en día – que se prevé que consumirán el 14% de la generación de electricidad mundial.

Con este escenario, el sector energético tiene que hacer los deberes de manera inminente. Para ello, se ha marcado una hoja de ruta para el 2020 con cinco tendencias principales.

5 tendencias para garantizar la energía

1. Descarbonización: motor de la lucha contra el cambio climático

La eliminación de las emisiones de CO2 es fundamental para poder reducir el calentamiento global, lo que ha dado lugar a una tendencia mundial hacia la descarbonización del planeta.

Los gobiernos están llevando a cabo diferentes medidas para reducir su consumo y están apostando por una transición hacia las energías renovables que copen el 100% de su mix energético. Durante el 2020, desde la Comisión Europea se pretende:

  • Impulsar aún más la entrada masiva de renovables 
  • El consumidor eléctrico tenga un papel más activo
  • Uso más intensivo de la electricidad como camino hacia la descarbonización

2. Aumentar la innovación e inversión en nuevas tecnologías

El uso de nuevas tecnologías digitales ha traído nuevas oportunidades en muchos sectores, entre ellos el energético. En 2020, la inversión en digitalización irá encaminada hacia los fines siguientes:

  • Equilibrar la seguridad energética y la accesibilidad de los consumidores.
  • Apostar por las tecnologías que permitan la producción de hidrógeno y su electrificación.
  • Fomentar las tecnologías que permitan el acoplamiento sectorial: nuevas formas de producción de hidrógeno, CO2 como producto y desde metanol hasta combustibles.

3. El petróleo y el gas seguirán siendo importantes en 2020                                                                                                

La presencia del petróleo y el gas seguirán desempeñando un papel importante dentro del mix energético. No obstante, los operadores del sector buscarán nuevas vías para reducir sus emisiones contaminantes.

  • Crecimiento continuado de la producción de gas natural hasta 2050.
  • La producción de carbón y petróleo alcanzará su punto máximo.
  • Inversión en tecnología baja en carbono, junto a otras actividades para promover el gas natural y reducir sus emisiones.

4. La generación energética aumenta

En el 2020 y en el resto de década, las energías renovables competirán con la generación de energía fósil existente.

  • La capacidad instalada se duplicará aproximadamente para 2040.
  • La energía fotovoltaica yla eólica crecerán entre un dos y un ocho por ciento.

Las soluciones de almacenamiento serán fundamentales para avanzar hacia el futuro energético. Así, las baterías de iones de litio jugarán un papel muy importante para hacer frente a los cambios de energía diarios, mientras que las soluciones de alimentación X serán necesarias para cubrir los cambios de energía estacionales.

Siemens ha apostado por diferentes soluciones para no desperdiciar los excedentes de energías renovables:

  • Siestorage. Un sistema de almacenamiento que, a través de baterías modulares denominadas Siestorage, acumulan grandes cantidades de electricidad. Permite a los hogares tener sistemas de paneles solares y poder alquilarlos como estacionamiento eléctrico. 
  • SILYCER 200. Un sistema que permite almacenar energía limpia a través del fenómeno conocido como electrólisis.
  • Future Energy Solution (FES). Otro sistema que almacena energía a partir de piedras naturales. El superávit de energía queda guardado en piedras naturales que alamcenan la energía en forma de calor para volver a transformarla en electricidad.

5. Las redes inteligentes protagonistas del año

La clave para lograr la neutralidad de CO2 es establecer una combinación de energía neutra en carbono y un sistema de comunicaciones sofisticado en el que los sistemas que producen y consumen energía se comunican entre sí en tiempo real. 

La inversión mundial en redes eléctricas se ha estancado en los últimos dos años, mientras que el gasto en una red digital ha continuado creciendo y lo seguirá haciendo en el 2020. Necesitamos construir autopistas eléctricas y redes inteligentes para crear un equilibrio entre la oferta y demanda.

Con la trasformación de las redes existentes en redes inteligentes, se contaría con: 

  • Una generación descentralizada de energía. 
  • Fluctuaciones equilibradas mediante el uso de renovables.  
  • Garantía de un suministro fiable y económico. 
  • Y con calidad de la electricidad

Además, la mayor penetración de los vehículos eléctricos se convertirá en un motor para el crecimiento futuro de la demanda de energía, lo que requerirá también nuevas inversiones para mejorar la red.

Estas son las principales tendencias que marcarán el comportamiento del sector energético a nivel global para el 2020. Todas están encaminadas a proteger nuestro planeta y a gestionar la creciente demanda de energía a la que se enfrenta el sector, de la manera más sostenible posible. Tendremos que esperar a que acabe el año para conocer si hemos hecho los deberes, aunque estamos seguros de que, como buenos alumnos, los habremos superado con éxito.