Cuando hablamos de ahorro de energía lo primero que nos viene a la cabeza es cómo podemos ser más sostenibles en casa y ahorrar en la factura de la luz. Pero hacer un uso más eficiente de la misma no sólo depende del consumidor final ya que a menudo el flujo eléctrico se interrumpe y no toda la energía generada llega a los hogares. Es decir, muchas veces la energía se desperdicia durante el transporte del lugar de generación a la red eléctrica.

Este problema afecta de manera especial a las energías renovables. La tecnología, una vez más, es la mejor herramienta para hacer frente a los retos que se presentan. Siemens está investigando cómo mejorar la transmisión de corriente continua de alto voltaje sin que haya pérdidas. ¿Cómo? Haciendo más inteligentes las estaciones, para que conviertan la energía alterna que reciben en continua de alto voltaje y suministrarla. Para que nos entendamos, se trata de aprovechar al máximo toda la energía sin que se produzcan fallos o interrupciones en el suministro.

La transmisión de corriente continua de alta tensión (HVDC o high voltage direct current, en inglés) es una solución para el transporte de baja pérdida de grandes cantidades de energía eléctrica a largas distancias. Para enlaces de transmisión de más de 600 kilómetros, las conexiones de líneas eléctricas que utilizan tecnología de HVDC son más eficientes que la tecnología de sistemas de transmisión de corriente alterna. La técnica HVDC es capaz de superar las barreras geográficas consiguiendo que la corriente eléctrica generada en los parques eólicos en ultramar pueda suministrarse a la red usual de forma eficiente.

Las instalaciones HVDC tienen como principales ventajas:

  • la reducción en las pérdidas energéticas respecto a las de corriente alterna
  • el transporte eficiente de energía a través de largas distancias
  • la exportación del excedente de energía hacia otros países o regiones

En España, tenemos todas las condiciones necesarias para aprovechar al máximo nuestra energía eólica. Para ello, tendríamos que situar los aerogeneradores en los lugares adecuados, aquellos en los que hay más viento, como las islas o en el mismo mar, a través de tecnología offshore y utilizar las redes inteligentes para llevar la energía de la forma más eficiente posible hasta nuestros hogares. De este modo, conseguiríamos importantes ahorros en energía, costes de generación y distribución y la obtención de una energía más limpia y sostenible con el medio ambiente.