Convertir un edificio en una infraestructura inteligente permite reducir costes de energía, cumplir con la normativa, como puede ser la relativa a la calidad del aire, y ofrecer entornos perfectos para los visitantes y empleados. Para llevar a cabo una conversión de este tipo existe una forma de financiación alternativa que aprovecha los ahorros obtenidos de las mejoras inteligentes para facilitar la autofinanciación de la inversión.

¿Cómo? Siemens Financial Services (SFS) ha elaborado un documento que estima el potencial de la conversión “autofinanciada” de edificios inteligentes en tres sectores de hasta 13 países:

  1. edificios comerciales
  2. edificios públicos
  3. hospitales

Llega la autofinanciación para los edificios inteligentes

Empresas, entidades públicas y hospitales, entre otros, no pueden hacer frente a una inversión financiera para adquirir las tecnologías que necesitan para digitalizarse. Aunque vean claramente cómo la digitalización puede mejorar su rendimiento, hacer que las operaciones sean más eficientes y los productos y servicios sean aún más personalizados, la mayoría de dichos organismos tienen muchas dificultades a la hora de acceder a la financiación.

Por ello, Siemens Financial Services ha ideado una nueva tipología de financiación inteligente que permite a las organizaciones adquirir la tecnología requerida y pagar paulatinamente según los beneficios derivados del uso de la misma. Gracias a la medición de los datos generados por las infraestructuras inteligentes, es posible crear acuerdos de financiación personalizados basados ​​en los beneficios comerciales esperados.

Se trata de una nueva forma de pagar la tecnología a lo largo del tiempo se conoce como “pago por resultados“; en ella la financiación se ha convertido en una parte integrada de la oferta que posibilita proyectos de modernización sin forzar el presupuesto de inversión. Una vez finalizado el contrato, el cliente se beneficiará de los ahorros en su totalidad.

Este tipo de financiación alternativa representa un cambio de mentalidad por parte de los responsables financieros y CFO: los CFO de los sectores público y privado reconocen cada vez más la necesidad imperiosa de la conversión a edificios inteligentes, pero les resulta difícil priorizar esta inversión de capital en detrimento de otras necesidades empresariales u operativas.

El beneficio de los mecanismos de autofinanciación, que aprovechan el ahorro energético futuro, es que el capital ya no representa un obstáculo. Además, el mercado de las tecnologías destinadas a edificios inteligentes está creciendo, por lo que es probable que los innovadores métodos de financiación del sector privado aceleren este crecimiento al facilitar a las organizaciones lograr la sostenibilidad de la conversión.