La crisis del agua es uno de los mayores problemas a los que se enfrenta la humanidad. Según un reciente informe del World Resources Institute, un cuarto de la población mundial corre el riesgo de una situación hídrica de extrema gravedad.

Desde la India hasta Irán y Botswana, 17 países de todo el mundo son los mayores expuestos a sufrir una crisis del agua. Para estas regiones, se acerca el Día Cero, es decir, el momento en que no saldrá ni una gota de agua del grifo.

¿Por qué ocurre? ¿Qué países son los que están más expuestos a una crisis del agua? Respondemos a esas preguntas y veremos algunas soluciones para este problema mundial.

¿Por qué sucede una crisis del agua?

El problema con el agua es que no somos conscientes de cuánto la necesitamos hasta que ya no podemos acceder a ella. De este líquido depende la vida.

El crecimiento de la población, el desarrollo socioeconómico y el aumento de la urbanización están incrementando la demanda de agua. Encontrar el equilibrio entre la demanda de agua y la disponibilidad de la misma, es uno de lo mayores desafíos a los que se enfrenta la humanidad.

Aunque estos son los detonantes de la crisis del agua, según los expertos, son otros los factores que lo empeoran:

  • Escasez de precipitaciones
  • Reducción del agua dulce
  • Mal aprovechamiento de los recursos hídricos
  • Pobreza y mal acceso a zonas con agua

Los países en crisis hídrica

Según el WRI, 17 son los países que mayor riesgo tienen de sufrir una crisis del agua y son:

  1. Qatar
  2. Israel
  3. Líbano
  4. Irán
  5. Jordania
  6. Libia
  7. Kuwait
  8. Arabia Saudí
  9. Eritrea
  10. Emiratos Arabes Unidos
  11. San Marino
  12. Bahrein
  13. Pakistán
  14. Turkmenistán
  15. Omán
  16. Bostwana
  17. India

¿Por qué lideran este ranking? Para empezar, muchos son países áridos y algunos están desperdiciando el agua que tienen. Varios dependen demasiado de las aguas subterráneas que deberían estar reponiendo o ahorrando para los tiempos de sequía:

  • Ciudad de México (México) está extrayendo agua subterránea tan rápidamente que la ciudad se está hundiendo literalmente.
  • Dhaka (Bangladesh) depende tanto de sus aguas subterráneas para sus residentes y sus fábricas de prendas de vestir que ahora extrae agua de acuíferos de cientos de metros de profundidad.
  • Los sedientos residentes de Chennai, acostumbrados a depender del agua subterránea durante años, ahora están descubriendo que no queda nada.
  • En toda la India y Pakistán, los agricultores están drenando los acuíferos para cultivar cultivos intensivos en agua, como el algodón y el arroz.

Doce de ellos se encuentran en Oriente Medio y África del Norte (MENA). Esta región es cálida y seca, por lo que el suministro de agua es bajo. Sin embargo, las crecientes demandas han empujado a los países a una situación de extrema tensión.

El cambio climático complicará aún más las cosas. El Banco Mundial afirma que la crisis del agua hará perder a estas regiones entre el 6 y el 14% de su PIB para 2050.

Aunque Europa parece quedar al margen del riesgo grave de falta de agua, entre los siguientes 24 países de la lista, que presentan “una escasez hídrica elevada”, se encuentran varios pertenecientes a la Unión Europea. Por ejemplo, Bélgica, España, Italia y Portugal llevan varios años teniendo que hacer frente a veranos extraordinariamente secos.

¿Cómo solucionar la crisis del agua?

Para 2030, se espera que el número de ciudades que sufrirán una crisis del agua aumente a 45 e incluya a casi 470 millones de personas. Todas las señales sugieren que la crisis está empeorando y continuará haciéndolo a menos que se tomen medidas correctivas.

Por ejemplo, alrededor del 82% de las aguas residuales de las regiones en riesgo de una crisis del agua no se reutilizan. El aprovechamiento de este recurso generaría una nueva fuente de agua limpia.

Según datos oficiales, 4.500 millones de personas no cuentan con un saneamiento seguro. Por ello, contar con soluciones para su tratamiento y el de aguas residuales es esencial a la hora de evitar contaminación de recursos hídricos naturales disponibles. Además de una red de abastecimiento óptima que evite desperdicios y roturas en las tuberías.

Por otro lado, según datos de la Organización Mundial de la Salud, 3 de cada 10 personas no tiene acceso a agua potable. Si tenemos en cuenta que el 97% del agua del planeta es salado, uno de los métodos que pueden ser la solución a la escasez de este elemento puede pasar por la desalinización.

La desalinización es el proceso mediante el cual se separa la sal del agua de mar o lagos para obtener el líquido con las condiciones óptimas para el consumo.

Países como Egipto o Marruecos ya están poniendo remedio a este hecho y han comenzado a implementar plantas de desalinización que ayuden paliar la crisis del agua que se vive en la región.