Hace apenas 200 años, sólo el 3% de la población mundial vivía en áreas urbanas. Hoy más de la mitad de la población del mundo -3.500 millones- reside en ciudades, que consumen aproximadamente dos tercios de la energía mundial y son responsables de hasta el 70% de las emisiones de gases de efecto invernadero, a pesar de cubrir sólo el 2% de la superficie de la tierra. Como consecuencia, los efectos derivados de la exposición a la contaminación de las urbes son cada vez más dañinos para el ser humano.

Estos riesgos pueden ser muy graves en el caso de las mujeres embarazadas. Según uno de los mayores estudios epidemiológicos realizados hasta la fecha a nivel europeo, la exposición de la madre a los contaminantes del aire durante el período de gestación incrementa significativamente el riesgo de un menor crecimiento fetal. En concreto, según el CREAL (Centro de Investigación en Epidemiología Ambiental), se estipula que cada aumento de 5 microgramos por metro cúbico en la exposición a las partículas finas, el riesgo de bajo peso al nacer aumenta en un 18%.

¿Cuáles son las consecuencias que podría tener en el desarrollo infantil? Los expertos han destacado los siguientes:
• Una evolución neurológica anormal como consecuencia de un menor tamaño del perímetro craneal.
• Mayor riesgo de desarrollo de hipertensión, diabetes e hiperlipemia.
Problemas respiratorios.

Por eso es importante que las ciudades busquen soluciones para mejorar la calidad del aire. La buena noticia es que muchas áreas urbanas están liderando el camino, como Copenhague. La capital danesa se ha impuesto la meta de neutralidad del carbono para 2025. Las medidas que está implementando para reducir sus emisiones de CO2 se centran en numerosas áreas estratégicas como el tráfico y el suministro energético.

La tecnología de Siemens está ayudando a la ciudad a conseguir sus objetivos. Por ejemplo, destaca un proyecto piloto en una escuela de Copenhague que tiene como objetivo monitorizar y mejorar el uso de energía en el centro. Al mismo tiempo, se ha construido una nueva planta de energía que utiliza la basura como combustible y que está equipada con tecnología de turbinas de Siemens. Esta planta suministrará a la ciudad calefacción distrital. Éstas son sólo algunas de las iniciativas que contribuyen a transformar el aire y, con ello, nuestra calidad de vida.

banner-sostenibilidad Siemens apuesta por el respeto al Medio Ambiente
Nuestra cartera medioambiental abarca toda la cadena energética e industrial. Desde la generación y distribución de energía hasta su uso eficiente en la industria, los hogares y el transporte, además de tecnologías vanguardistas para la gestión del agua y el control de la contaminación atmosférica.