En ocasiones, la arquitectura puede unirse a la ingeniería y crear obras pioneras que nunca han sido vistas. Si, además, la infraestructura es capaz de adaptarse a las inclemencias metereológicas y generar energía por sí mismo, nos encontramos ante un edificio eficiente y sostenible con su entorno. Éste es el caso de “Rotating Tower”, rascacielos diseñado por David Fisher en colaboración con Dynamic Architecture.

Pensado para ser construido en Dubai, el rascacielos ha sido diseñado para que las diferentes plantas roten persiguiendo las mejores condiciones de luz y viento presente en el entorno. Los giros se realizarán entorno a un núcleo de hormigón que hará que los usuarios vean una completa panorámica de 360º de la ciudad en tan sólo 90 minutos.

Su movimiento no es lo único novedoso del edificio ya que se trata del primer rascacielos prefabricado. El 90% de sus materiales se ensamblaron en una central y, una vez finalizado, se trasladó al lugar de instalación. Este método tiene una serie de ventajas frente a la construcción tradicional:

•    Es mucho más rápida, asegurando un ahorro de alrededor de un 30% del tiempo con respecto a una torre de similares características según estiman los promotores

•    Incremento de la seguridad para los trabajadores ya que estarán realizando el ensamblaje en una fábrica, evitando accidentes por la altura de este tipo de edificios

•    Las cocinas y los baños se instalarán en las unidades en la fábrica, lo que disminuye el número total de trabajadores necesarios in situ

Además de esta serie de ventajas, el diseño de Dynamic Architecture es un edificio sostenible. La construcción cuenta con varias turbinas eólicas entre las diferentes plantas que componen el rascacielos, de manera que, gracias al giro de los pisos, genera energía eólica suficiente para autoabastecerse.

Por otro lado, los paneles solares que conforman la estructura, almacenan la energía procedente del Sol. Gracias a ambas tecnologías, el edificio puede producir alrededor de 1,2 millones de kilovatios-hora de energía al año, es decir, recoge electricidad suficiente para abastecer 3 rascacielos del mismo tamaño.

La “Rotating Tower” es una solución arquitectónica singular y, además, se convierte en una “central eléctrica” que produce energía verde para la ciudad.