Esta semana, el Planeta ha entrado en número rojos, es decir, hemos consumido todos los recursos naturales que pueden regenerarse en un año. Por este motivo, se hace indispensable tomar medidas que reviertan este problema y nos hagan ser más eficientes y sostenibles. Ya que el 90% de nuestro tiempo nos lo pasamos en una infraestructura, una solución ideal sería contar con edificios verdes en nuestro día a día.

Las características de los edificios verdes

Una infraestructura es considerada como edificio verde si obtiene alguna de las diferentes certificaciones de construcción. Una de las más conocidas es la “Leadership in Energy and Environmental Design” (LEED) que clasifica a las estructuras de menor a mayor grado de sostenibilidad: LEED certifícate, LEED Silver, LEED Gold y LEED Platinum.

Pero, ¿qué características debe cumplir un edificio para ser verde?

  • Emiten menos contaminación o gases de efecto invernadero
  • Sus costes de operación son menores y aumentan el valor de los activos
  • Reducen el consumo de agua y energía

Para poder lograr alcanzar estos objetivos, se pueden implementar diferentes medidas como, por ejemplo:

  • Utilizar de equipos electrónicos eficientes, desde ordenadores e impresoras en caso de las oficinas, hasta electrodomésticos, que se apagan por las noches y durante los fines de semana.
  • Instalar de bombillas de bajo consumo y sensores de movimiento.
  • Usar de sistemas de automatización y control centralizado de temperatura.
  • Emplear equipos de climatización eficientes ya que pueden reducir la factura de la electricidad hasta un 30%.
  • Producir menos cantidad de residuos mediante la reducción del uso del papel (una de las mayores fuentes de residuos en las oficinas) o el reciclaje de elementos.

Madrid, la ciudad con más edificios verdes en España

Cada vez más, las empresas se preocupan por mejorar su imagen a través de su compromiso con la sostenibilidad. Es por esto que el número de edificios verdes está aumentando.

En España, ya son 166 los edificios certificados como sostenibles, repartidos en varias ciudades. Madrid encabeza el ranking con el mayor número de edificios verdes, seguido de Barcelona y la provincia de Vizcaya. Entre estos, 98 son oficinas, 24 son edificios comerciales y 11 están destinados a la industria.

El edificio más sostenible de España es el de la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EQUIPO), situado en Alicante. Otro ejemplo de edificio sostenible en nuestro país es el AA81 de Torre rioja Madrid, certificado con LEED Platinum.

Así son las oficinas verdes de Siemens

La sede de Siemens en Múnich es un ejemplo de oficinas verdes. Este edificio, de estilo vanguardista, está certificado con el nivel máximo de sostenibilidad por la DGNB así como del sello LEED.

Se trata de una infraestructura que ha sido pensada para satisfacer las necesidades dinámicas del mundo laboral actual. Es una instalación de tipo open space, diseñada acorde con las necesidades de los empleados, con el objetivo de facilitar la comunicación y el flujo de ideas.

El edificio se nutre con energías renovables y cuenta con un sistema fotovoltaico instalado en el techo de gran alcance. Además, la climatización se optimiza gracias a la tecnología HVAC, una losa de cimentación que enfría las oficinas en verano y ayuda a calentarlas en invierno.

Para aprovechar las horas de luz y reducir el consumo eléctrico, los espacios de trabajo se sitúan al lado de grandes ventanales. Además, en su construcción, se han utilizado únicamente materiales con bajo contenido de sustancias nocivas.

La oficina está equipada con estaciones de recarga para coches eléctricos y con un aparcamiento de bicis, además del de coches. Esta iniciativa pretende fomentar los hábitos de movilidad sostenible entre los empleados.

Todo esto ha permitido reducir las emisiones de CO2 en, aproximadamente, 9 kilogramos por metro cuadrado, lo que supone un 90% más con respecto a la anterior casa matriz de la compañía.

En definitiva, se trata de una estructura inteligente que satisface los estándares de sostenibilidad más altos a nivel global.

La financiación privada es clave para desarrollar edificios verdes

El uso de sistemas inteligentes de control y automatización tiene el potencial de reducir el consumo de energía, las emisiones de carbono y los costes de funcionamiento para las estructuras ya sean viviendas u oficinas. Sin embargo, la falta de recursos financieros suele ser uno de los problemas para adaptar las infraestructuras y convertirlas en edificios verdes.

El uso de capital del sector privado se ha convertido en una alternativa cada vez más común para financiar dichas inversiones. Según un estudio realizado por Siemens Financial Service, en España, hay un potencial de 4.200 millones de euros de financiación privada para el desarrollo de la ciudad inteligente.

La financiación especializada puede ayudar a que la tecnología verde esté disponible más rápidamente tanto en las ciudades como en los edificios privados.