Skolkovo es el hermano europeo de Silicon Valley. Situado cerca de Moscú, este nuevo centro de innovación pone a disposición de los científicos rusos un lugar de trabajo para investigar, junto con otros colegas internacionales, sobre sistemas informáticos, biotecnología, eficiencia energética, tecnologías médicas, nucleares y aeroespaciales.
Hypercube, Skolkovo Con una financiación de 3.000 millones de euros, el complejo de investigación e innovación está diseñado para albergar, en 2015, una universidad, un parque industrial, edificios de oficinas y residencias para más 21.000 personas. En septiembre de 2012, se inauguró el primer edificio de Skolkovo: el Hypercube. De estilo futurista, cuenta con un centro de conferencias y oficinas de las empresas que han financiado su construcción.

Cada parte de Hypercube, está pensada para que cubra las demandas energéticas del edificio de manera sostenible y eficiente. Por ejemplo:

Placas solares suministran la electricidad demandad por el edificio.
• El agua de la instalación proviene del almacenamiento de la lluvia y los pozos cercanos.
• La calefacción se produce gracias a diferentes bombas que llevan el calor desde fuentes geotérmicas.
• Las grandes ventanas y conductos de luz garantizan un uso mínimo de la luz artificial, lo cual es inusual para Rusia, donde las pequeñas ventanas se instalan normalmente en los edificios con el fin de evitar pérdidas de calor. Sin embargo, Hypercube cuenta con convectores y cristales de tres capas con los que se crea una cortina de aislamiento y hace que la temperatura permanezca estable.
• La fachada está equipada con 60.000 LEDs de tres tonos con el que iluminar sus inmediaciones y sobre la que se proyectan películas promocionales sobre el proyecto.

Hypercube está controlado por un sistema de gestión energética de Siemens con el que se controla la temperatura, la iluminación y la distribución de electricidad. El objetivo es hacer que el edificio sea lo más económico, ecológico, ergonómico y eficiente posible. Gracias a todos estos sistemas, se ha convertido en uno de los primeros edificios rusos en recibir el reconocimiento LEED como “Infraestructura Verde”.

A finales de 2013, se instalarán dos subestaciones transformadoras de 63 MW que garantizaran un suministro fiable de electricidad para todos los futuros residentes y empresas. Además, las líneas de transmisión de energía cuentan con sistemas de aislamiento para poder transportar de forma segura una gran cantidad de electricidad de manera subterránea.

Una de las primeras compañías que creyeron en este proyecto fue Siemens. De hecho, ha invertido ya 40 millones de € para la creación de un centro especializado en temas de eficiencia energética, tecnologías de la información y medicina nuclear y que empleará a 150 científicos. Los investigadores de la compañía ya están trabajando con científicos rusos y alemanes en el desarrollo de nuevos generadores de microondas.

Las empresas extranjeras disfrutarán de la exención de impuestos durante diez años ya que incorporan rápidamente los conocimientos que adquieren en nuevos productos y servicios. La Fundación Skolkovo, que está encabezada por Viktor Vekselberg, cubrirá hasta el 50% de los costes necesarios para su construcción.

El Centro de Innovación Skolkovo está diseñado para convertirse en una ciudad modelo a nivel ambiental. Se tiene previsto que las instalaciones cuenten con carriles bicis y sitios de recarga para vehículos eléctricos que faciliten la movilidad de sus residentes. Estos eCar serán parte de la primera red inteligente de Rusia.

Siemens Building Technologies
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